El consejero de Sanidad, Enrique Ruiz Escudero, ha defendido este jueves la decisión de externalizar el servicio de limpieza del hospital Gregorio Marañón, cuya licitación ha sido suspendida cautelarmente, aunque ha afirmado que, si bien esto no significa que el procedimiento “sea ilegal”, la Comunidad cumplirá “lo que vayan dictaminando los tribunales”.
El Tribunal Administrativo de Contratación Pública de la Comunidad de Madrid ha suspendido esta semana el proceso de adjudicación del contrato de externalización, y pasará a aplicar el contrato centralizado para centros hospitalarios hasta que se resuelvan los recursos presentados por CCOO, UGT y la Asociación Profesional de Empresas de Limpieza.
El día 3 de julio, el Servicio Madrileño de Salud (Sermas) había presentado una licitación al lote 7 para los servicios de limpieza integral de los hospitales, que recoge la contratación externa para limpieza de 33.201,42 metros cuadrados del Gregorio Marañón, el 20 % de la superficie total del hospital.
Escudero ha explicado en el pleno de la Asamblea que el contrato, que se ha decidido licitar “teniendo las bajas que ha presentado la plantilla del personal de limpieza” durante la crisis sanitaria del coronavirus, prevé “una plantilla adicional de 54 trabajadores más”.
“Ante esta circunstancia y entendiendo la importancia de garantizar la limpieza en el centro, ha decidido incorporarse al grupo de centros que disponen de un servicio de limpieza centralizado”, ha insistido.
El consejero ha agregado que en el Sermas hay 17 hospitales “que tienen centralizado el servicio de limpieza, para lo que cuentan con tres empresas”, mientras que “en el caso del Gregorio Marañón, que presta el servicio de limpieza con personal propio, ha sido el hospital quien ha gestionado los refuerzos adicionales precisos”.
“La crisis sanitaria del COVID-19 nos está obligando a adoptar medidas de refuerzo de limpieza”, ha subrayado.
Escudero ha alegado que “no es cierto que se privatice la Sanidad madrileña porque se contrate un refuerzo de un servicio de limpieza” y ha negado que la huelga de 48 horas realizada por las limpiadoras del hospital “haya sido un éxito”, debido a su “bajo seguimiento”.