La Junta de Gobierno del Ayuntamiento de Alicante ha suspendido hoy la adjudicación del contrato del servicio de limpieza de colegios y dependencias municipales a una UTE formada por Clece y Fissa tras el recurso presentado por la segunda empresa clasificada, Fomento de Construcciones y Contratas (FCC). La Junta de Gobierno de hoy ha contado con la presencia de Víctor Domínguez, edil de Guanyar, restituido en su puesto por el alcalde de Alicante, el socialista Gabriel Echávarri, a petición de Compromís. El regidor quitó el voto a Domínguez en la Junta de Gobierno a principios de año en una decisión unilateral.

Según la propuesta de acuerdo firmada por el concejal de Contratación, Natxo Bellido, el gobierno local ha paralizado la contratación de la UTE de Clece y Fissa, que aventajó en más de dos puntos a la segunda clasificada, que ha presentado cuatro alegaciones al considerar, entre otras cuestiones, “inadecuada” la valoración de un criterio dependiente del juicio de valor de los técnicos municipales. La empresa recurrente sostiene que existe “arbitrariedad, extralimitación del criterio definido en el pliego, falta de proporcionalidad, transparencia y motivación”.

El caso está ahora en manos del Tribunal Administrativo Central de Recursos Contractuales, según ha explicado hoy Bellido al término de la Junta de Gobierno. El acuerdo de la Junta de Gobierno contempla la “suspensión de la tramitación del expediente relativo al servicio de limpieza de colegios y dependencias municipales, aceptar el informe de la comisión técnica y remitir al Tribunal Administrativo el citado informe, la copia del expediente de contratación y el acuerdo alcanzado hoy.

La UTE que quedó en primera posición en el concurso fue la única aspirante de las siete que concurrieron al concurso que no se comprometió por escrito a mantener todos los puestos de trabajodurante los años que se prolongue el contrato, que será de dos años con una posible prórroga de otros dos años. La unión de Clece y Fissa no de manera formal la propuesta incluida por el Ayuntamiento, tras una negociación con los sindicatos, para «mantener en sus puestos de trabajo, durante el periodo de vigencia del contrato, al personal adscrito al servicio, salvo en los casos de extinción de la relación laboral por la voluntad de los trabajadores, jubilación, fallecimiento o despido disciplinario».

El pliego ahora paralizado por el recurso de FCC es el segundo del servicio de limpieza de colegios y dependencias municipales que ha sacado a licitación el tripartito de Alicante, después de que el anterior pliego -que se anunció a finales de 2016- se retirase para evitar una huelga promovida por los sindicatos.

Por su parte, la concejal del PP Mari Ángeles Goitia ha advertido hoy que este nuevo retraso en la adjudicación del servicio de limpieza de colegios y edificios municipales “supondrá que 27 meses después de que expirase el anterior contrato, Alicante siga sin tener adjudicado uno de los contratos más importantes de nuestra ciudad”.

Goitia ha recalcado que “cuando los partidos que ahora están en el tripartito estaban en la oposición hicieron de este contrato uno de sus caballos de batalla para atacar al PP”. La concejal popular lamenta “los muchos meses que la ciudad ha perdido esperando a que el tripartito se pusiera de acuerdo sobre si municipalizar o no este servicio tan importante para la ciudad, y para cientos de trabajadores de Alicante que, tanto ellos como sus familias, han estado durante todo este tiempo pendientes de la decisión de este equipo de gobierno, y aún siguen”.

Para Goitia, “llama la atención cuando estaban en la oposición se rasgaban las vestiduras cuando un servicio municipal se estaba prestando fuera de contrato, y ahora que gobiernan ellos hemos estado pagado todos los alicantinos durante veinte meses a la empresa de Enrique Ortiz sin haberse licitado este servicio”.