La labor de estos profesionales es prioritaria para desinfectar las áreas afectadas o con riesgo de contagio y evitar la propagación del virus.
Desde que estalló la crisis, las empresas que prestan esta actividad han visto incrementados sus servicios un 10%.
AELMA denuncia la dificultad para adquirir los equipos de protección individual adecuados para desempeñar estos servicios con seguridad y solicita al Gobierno y autoridades sanitarias que prioricen a este colectivo en el suministro de los materiales necesarios.
Ante la situación actual que vive la Comunidad de Madrid, la región más afectada por la crisis del coronavirus, la patronal de las empresas de limpieza de la Comunidad de Madrid (AELMA) solicita al Gobierno que ofrezca incentivos a los empleados de la limpieza para que sigan prestando sus servicios con la mayor normalidad posible y garantizando su seguridad.
“En estos momentos, hacemos un llamamiento al Gobierno a que haga todo lo necesario para detener la propagación del virus y los trabajos de limpieza y desinfección son imprescindibles. Si no tenemos quien los realice, agravaremos aún más esta crisis”, afirma Jesús Martín, presidente de la asociación. De hecho, desde que estalló esta crisis, las empresas del sector han visto incrementados sus servicios un 10%.
AELMA es sensible a las situaciones personales de cada empleado y entiende que estos profesionales pueden haberse visto afectados por el cierre de los centros educativos, por eso, reclama al Gobierno un paquete de medidas adicionales para que este colectivo pueda desempeñar con normalidad su trabajo que, en estos momentos, es prioritaria.
Asimismo, la patronal apela a la responsabilidad de todos los profesionales del sector para que no dejen de asistir a sus puestos de trabajo, ya que su labor puede evitar un mayor contagio. En este sentido, la asociación ha solicitado al Gobierno y a las autoridades sanitarias que, además de los profesionales sanitarios, se priorice a los empleados de la limpieza en el suministro de los equipos de protección individual (EPIS) adecuados para la realización de su trabajo en unas óptimas condiciones de seguridad. Esta petición es fruto de la dificultad que están teniendo las empresas del sector para acceder a determinados materiales de protección, fundamentalmente, las mascarillas FPP2/3, imprescindibles si se entra en contacto con áreas que se han visto afectadas o que estén expuestas a un riesgo.